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No te pasa que todos los días cuando te vas a arreglar ya sea para salir al trabajo, a estudiar o lo que necesitas hacer, empieza un juego del que a veces es imposible salir, ese juego de vestirse y desvestirse porque piensas, “esto no me queda bien hoy”, “yo no me sé vestir”, “es que, es más, yo no tengo ni que ponerme”, te empiezas a frustrar, pero tienes un clóset inmenso con mucha ropa, y aun así, te limitas y cierras tus posibilidades de arriesgarte y verte bien.

Y es precisamente de eso que te queremos hablar hoy, porque estos límites no solo pasan a la hora de vestirte, sino para todo en la vida, porque si tú te cierras o te limitas desde el principio, por ejemplo, para encontrar tu trabajo soñado y dices, “es que nunca va a ser para mí”, “yo todavía no soy tan buena para ese trabajo”, desde que lo piensas te estas cerrando las puertas y estas dando un rotundo no a lo que deseas.

  • Quita lo que no seas tú del clóset: saca pa´ fuera eso que no va contigo, no es necesario acumular prendas que solo las has utilizado una sola vez y sabes que no te la volverías a poner si no es necesario.
  • En lugar de decir “Yo no tengo estilo: Piensa en que es lo que más te gusta de tu forma de vestir, con que te identificas más y busca referentes que visibilicen eso que quieres en ti, tener un tablero de Pinterest es una buena opción.
  • Si tienes un clóset lleno y dices que no te sabes vestir: Empieza por los básicos (jean negro, camisa, chaqueta de jean), así te vas arriesgando, le vas agregando más prendas y miras qué te sirve y qué no.
  • Conoce que le queda a tu cuerpo: Ama tu cuerpo en todas sus formas, la moda es divertida y más si empiezas a conocer tu tipo de silueta.
  • Rompe creencias: Que pereza un clóset aburrido, busca tener siempre prendas con colores vivos, neutros, básicos y de moda, obvio, que reflejen todo de ti.